Desembocadura Guadalhorce

La desembocadura del río Guadalhorce en el Mediterráneo es un lugar singular, sus parajes se diferencian y multiplican rodeados por el entorno de una gran ciudad. A metros de zonas urbanas, entre la ruidosa autovía y el mar, las aguas dulces y salinas se funden manipuladas en sus cauces por la acción humana. Por un cúmulo de circunstancias la vida animal y vegetal emerge marcada por el calendario natural de las especies y el clima. Un escenario con unos actores rotando a cada momento.





Las épocas más frías y lluviosas atraen a los patos invernantes u oscurecen el plumaje de los residentes.




La aparente fragilidad de los polluelos de cigüeñuela y de los chorlitejos, bajo el sofocante calor, ofrece momentos de ternura y admiración en su lucha por la vida.

En los bordes de la Laguna Grande, los enormes eucaliptos sirven de posadero a cormoranes, estorninos, cernícalos, halcón peregrino y águila pescadora. 


Primavera: Nuevos inquilinos.

En los días más calurosos de Agosto. las distintas especies de gaviotas preparan sus migraciones.


Los escasos metros no pueden separar del todo la vida silvestre de la humana. Sobre la urbanización de Guadalmar las rapaces, estables o de paso, sobrevuelan augustas.

Temporal; la lengua de arena deja paso a la fusión de las aguas inmensas y las que bajan de los montes.

Todas las especies de garzas se muestran a lo largo del año. Proyectan sus vuelos y reflejan su envergadura mientras pescan.



Bajo nivel de transitoria sequía, aparece el fango y es tiempo de inquietas limícolas. 



Una vez pasados los escasos rigores invernales, los llanos arenosos se visten con la alegría de flores de los dormilones.

Los hinojos ofrecen generosos alimento y olor, incluso en los periodos más secos y solitarios.



Los mirabeles invaden, agradecen sus colores al sol.




El flujo de las rutas migratorias en la costa del Mediterráneo favorece las citas inesperadas de aves viajeras. 

Cae la noche, el sol se ausenta opuesto al mar. Es el momento de los pequeños mamíferos y la lechuza.



4 comentarios:

  1. Ha sido un placer para el alma contemplar todas estas imágenes de naturaleza y de las maravillas que vuelan. Para mí significan algo muy profundo, casi inmenso. Con cada fotografía, me he estaso traslando al lugar e imaginándome con la cámara en la mano, acelerada -como me pasa siempre- consciente de que puede ser una ocasión única, que no vuelva a repetirse, por ninguna de las condiciones de luz y de ambiente. Lo he pasado estupendamente y he mirado y remirado. Has conseguido, con tu excelente labor fotográfica, brindarme un intenso momento de felicidad -y no son ya muchos esos momentos en mi vida-, en fin que no sé cómo expresar la emoción. Perdona.

    Realizas un blog que es una maravilla para quienes nos sentimos atraidos por los temas de naturaleza. Recibe un abrazo de esta abuela que admira tu paciencia y el amor con que realizas tus fotografías.

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  2. Increíble la Naturaleza, maravillosas las fotos.
    Un abrazo.
    HD

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  3. UN TRABAJO QUE NO TIENE PRECIO, ACERCAR A TRAVÉS DE TUS MAGNÍFICAS FOTOS LA LUCHA POR LA SUPERVIVENCIA, LA FUERZA DE LA NATURALEZA POR EXPRESARSE Y TRIUNFAR.
    PRODUCE UNA GRAN ALEGRÍA EN DEFINITIVA,
    ¡¡GRACIAS!!

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